lunes, 26 de mayo de 2008

VEINTICINCO

El vino, la carne jugosa de ciervo y las manzanas asadas servidas en la cena satisficieron el apetito de Horus. Había subido junto a Pierina a su habitación, pero el sueño lo había vencido antes de que pudiera obtener algo de su cariño. Ella lo miró dormir un rato, aburrida e inquieta se levantó y caminó hacia la ventana. La noche estaba serena, el destino de Prisia corría a su antojo, en dos días llegarían a Humer las tropas de su ejército con la sangre de los pueblos vecinos en sus lanzas y las llaves de sus ciudades. Su poder se expandía cada día más, pero ella sólo necesitaba una cosa.
Se paró en la cornisa y saltó al vacío. En el aire extendió sus brazos y se trasformó en un águila dorada. Sobrevoló campos, lagos, y bosques. Llegó hasta la cima de una montaña en la que minutos antes habían estado Victoria y Ada contemplando la entrada a su castillo, y ahora lo hacia ella. Una lágrima corrió por su plumaje. Veinte años atrás había matado en ese mismo lugar a su hermana melliza. “Napea, si le hubieras dicho no, hoy tendrías una vida feliz”, pensó.
Pierina y Napea habían crecido mimadas por su padre, y por la gente que trabajaba para él. La primera era una niña inquieta, curiosa, gustaba de andar entre la gente del pueblo. Había aprendido a hacer trabajos manuales como canastas de mimbre, cuerdas con cueros y andar en medio de los bosques oscuros guiada por su propio instinto. Practicaba con los soldados esgrima. Le gustaba vestir como hombre y todos la veían como uno de ellos. Napea era dulce, delicada, y débil. Temía caminar sola fuera del castillo, y pasaba horas leyendo en la biblioteca o en la cocina aprendiendo nuevos y mejores platos. Las hermanas eran distintas, pero sentían la una por la otra el mismo amor.
A los dieciocho años las hermanas se separaron, Pierina se fue a Humer y Napea se quedó en Prisia, y el hechizo de la bruja del pantano empezó a hacer efecto: por las noches Pierina se volvía águila y Napea puma.
Cuando su padre murió y los pueblos entraron en guerra, llegó un ejército de hombres mercenarios, que por dinero y comida peleaban a favor de un ejército, sin aliarse con ninguno. Galo era el nombre de su líder. Pasaron una noche en el bosque y Pierina lo descubrió cuando sobrevolaba en él. Lo vio y su corazón sintió la calidez del amor. Él estaba sentado frente a un fogón y ella se acercó tanto que de repente las chispas del fuego quemaron la punta de sus alas, ese calor y el de su corazón la desnudaron y cayó sobre él. Galo sintió su piel y no pudo más que hacerla suya. Cuando él despertó, Pierina ya no estaba. Salió a caminar por el bosque, se alejó y se perdió. Llegó hasta un lago en el que algunos niños jugaban, una mujer los acompañaba. El sol parecía reflejarse en su rostro, en su luz azul. Galo la vio y la amo. Sintió esa sensación inexplicable que le hace saber a un hombre que esa ha de ser la mujer de su vida.
Pierina salió cada noche a buscarlo, pero Galo ni sus hombre estaban en sus bosques. Una mañana llegó un vocero de su hermana con una carta de su puño y letra en el que le comunicaba que contraería matrimonio. Le pareció extraño, pero su hermana era misteriosa y solía ser reservada. Cuando llegó al salón en donde Brisa esperaba a los novios para bendecirlos, su sorpresa fue enorme cuando vio entrar a su Napea del brazo de Galo.
No pudo aguantar hasta el final de la ceremonia, algo en ella se rompía. Corrió, corrió y se internó en el pantano donde estaba enterrado su padre. Se quitó sus joyas y se rasgo el vestido. Pasó la tierra pantanosa por su cuerpo y apoyó sus manos sobre su pecho izquierdo, las enterró dentro de su cuerpo. No perdió sangre y de su pecho extrajo su corazón que se deshizo como cenizas. Lejos de marchitarse, se paró y al voltearse lo vio a Horus. Él curo su herida, le prometió devoción y venganza.

25 comentarios:

Aguabella dijo...

Dios mio Ana, que maravilloso relato, y que penita me dieron Napea y su hermana.
aqui me quedo embobada como si de repende fuera a aparecer un nuevo capítulo.

Maravillada me vuelvo a mi blog.
y esperaré el siguiente.
un besito y ramitos de estrellas para ti y los tuyos.

Anónimo dijo...

La saga está cada vez más interesante. Gracias y a esperar como dice aguabella.

Cecy dijo...

Ana, que de giros encontramos con estos misteriosos personajes, y ahora volvió el suspenso...

Besitos

Unknown dijo...

El amor de hermanos, la amistad, el lazo.

Sigo en la saga, esperando llegar a tiempo a Prisia.

un abrazo

Anónimo dijo...

devocion y venganza...que lindas palabras, que contexto interesante, que bien que la haces ana la puta madre.
devocion y venganza.
un abarzo

-.Belu.- dijo...

me encanta... cada día me gusta más!!!

sos demasiado grosa ana!

Resiliente dijo...

ayyyyyyyyyyyyyyyyyyyy mas mas. besos

Mar dijo...

mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas
y si... ya soy adicta!

huellas compartidas dijo...

Anita querida... gracias por estar siempre ahi !
Estoy un poco mejor, tratando de re-acomodar esos hilitos que andan sueltos y que a veces nos molestan...
El proceso no es nada placentero, la búsqueda suele generar mucha incertidumbre y muchos re-cuestionamientos encadenados... pero la certeza que tengo de que lo que se viene despues es realmente maravilloso, me da esas fuerzas vitales para seguir caminando...
La primavera esta cerca... es cuestión de saber esperarla nada más...
Gracias querida Ana por estar siempre alentandome y preocupandote... es muy apreciado por mi tu gran gesto !
Que estes bien...
Besos

Mar dijo...

ay! escribí y se me borró!!
te decia q si, lo fui a ver Ismael pero estaba re lejos... ahora el 17 lo voy a ver al Teatro Argentino y en fila 4!
El entusiasmo lo generas vos con lo que escribís...
Besos

Nanny Ogg (Dolo Espinosa) dijo...

Cada día estoy más engachada a esta historia :)

Besos

Silvina dijo...

Uy... y el dibu?


Besos!

Uschi dijo...

"Las hermanas eran distintas, pero sentían la una por la otra el mismo amor."

Adoro a mis hermanas (y tengo muchas!)

Saludos Ana

Ana Ortiz dijo...

Aguabella, gracias x esos ramitos de estrellas que me están iluminando.

Ernesto51, gracia x pasar.

Cecydececi, que la mudanza sea con éxitos.

Nacho, mucha luz para tu viaje.

Espejo, gracias x pasar y por tus palabras.

Belu, gracias x dejarte un tiempito para leer el blog y suerte en los parciales.

Mar y Marce, espero seguir colmando sus expectativas.

Huellas Compartidas,si más o menos se sabe a dónde se quiere ir, no importa lo que suceda en el camino, el destino llega tarde o temprano.

Ana Ortiz dijo...

Nanny,gracias x estar.

Silvina,¡notaste que faltaba mi dibu!
No lo pude terminar y no queria postergar el posteo, pero ya lo subiré. Voy a seguir poniendo mis dibujitos, espero no cansarlos.

Flor, yo no tengo ninguna, pero me hubiera gustado.

Diseño y Planificación Comunicacional dijo...

Genial, genial anita...

Anónimo dijo...

Ana!
No en vano digo y lo redigo... ¡atrapante!... y qué fuerte lo que pasó con las hermanas...
... ufs... que me pone un poco triste eh?
Seguimos...

Bueno niña, te dejo un regalo en mi blog, sé que tú mereces; cuando puedas lo buscas, si?
Besitos.

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Bueno, bueno niña, cada día me dejas más intrigada y tengo más ganas de ver como continua la historia. Mientras tanto no me queda otra cosa que esperar y enviarte de paso, muchos besicos.

este dijo...

tenes que repartir el libro entero, no quiero esperar para seguir leyendo!

saludos, que andes bien

mArXelLa dijo...

ohh que tristeza paso Pierina..me dejaste pensando en lo dificil que es encontrar al amor indicado, por que uno puede amar, pero si no te aman pues no hay nada que hacer, no se puede forzar. "No perdió sangre y de su pecho extrajo su corazón que se deshizo como ceniza" que frase, ahora esperemos que renazca como el ave fénix..un beso!

Eseya, Muñecas con historia dijo...

Hola!!

Estamos a mano por que yo hace dias que no paso, ahora mientras desayuno, me leere los capitulos que me faltan. Entre la enfermedad que me ha tenido mal, la administracion de un club de tejido y mis temas personales, como que me comen las horas del dia y llega la noche y me quedaron muchas cosas en el tintero.

Ya me estoy saboreando con la lectura pendiente, se que voy a quedar pidiendo maaas, como todos aqui!!


Besototes enormes Ana!!!

microcuentos dijo...

Me gustó mucho lo de la comunión entre hermanos..inepxplicablemente cierto,


saludos

Microcuentos

Filomena Lonetti dijo...

Hola Ana,te escribe Roxana,gracias por tu lindo comentario en mi mi blog,que las estrellas iluminen a tu alma.Roxana Miriam González de la Ciudad de Rosario

Aguabella dijo...

ANA, te he dejado un premio que creo te va a gustar,pero sin compromiso que ya sé que estas muy liada.

un besito

Susana Peiró dijo...

Aquí vengo llegando (y rogando que Blogger me permita dejarte el comentario)

Las trampas de la vida y las circunstancias extrañas que marcan el comportamiento de las personas, han sido recreados en forma muy inteligente en este capítulo.

"Se quitó sus joyas y se rasgo el vestido. Pasó la tierra pantanosa por su cuerpo y apoyó sus manos sobre su pecho izquierdo, las enterró dentro de su cuerpo. No perdió sangre y de su pecho extrajo su corazón que se deshizo como cenizas" ¿Acaso no es la perfecta descripción del sentimiento de pérdida, de ilusiones rotas, de vacío?

Muy buen trabajo Ana! Estás levantando la apuesta y la intensidad capítulo a capítulo!

Muchas Gracias Bonita!

Te dejo un besote!